El Gobierno admitió que el Impuesto a la Venta de Moneda Extranjera es
un tributo a las elevadas ganancias que obtiene la banca y que no será
pagado por el ciudadano. Se advirtió con aplicar sanciones a las
entidades que cobren más por la venta o paguen menos por la compra.
El jueves, el vicepresidente Álvaro García dijo en
Santa Cruz que los recursos que se obtengan por el nuevo impuesto que
paguen las entidades financieras (bancos, microfinancieras, mutuales,
cooperativas de ahorro) y las casas de cambio se destinarán a las áreas
de salud y educación.
“Es un impuesto a la ganancia
bancaria porque en los bancos, por el buen estado económico, están
teniendo buenos ingresos. Solamente por cambiar dólares y vender dólares
la banca el año pasado (2011) ha ganado $us 84 millones”, señaló.
El miércoles, el ministro de Economía, Luis Arce, indicó que la
aplicación del nuevo tributo tiene el propósito de profundizar la
política de bolivianización que impulsa el Gobierno desde 2006 y la de
redistribuir los ingresos de la banca.
El proyecto de
Ley de Modificaciones al Presupuesto General del Estado (PGE) 2012
prevé aplicar a partir de este año un nuevo tributo a las entidades
bancarias y casas de cambio por la venta de dólares.
El Impuesto a la Venta de Moneda Extranjera (IVME) regirá por 36 meses
(tres años) y será del 0,70% por cada operación gravada. Por ejemplo, si
un cliente compra $us 100, las entidades financieras cancelarán al
fisco un tributo de $us 0,70. A decir de Arce, en 2011 las utilidades de
la banca por la compra y venta de dólares alcanzaron los Bs 575,3
millones ($us 83 millones). Agregó que con la aplicación de la nueva
medida, el Tesoro General de la Nación (TGN) participará de una
“partecita”, de un “negocio tan lucrativo” como es la venta y compra de
divisas extranjeras.
El jueves, el presidente de la
Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban), Kurt Koenigsfest,
negó que sus afiliados hayan obtenido en 2011 una ganancia de Bs 575,3
millones por la compra y venta de dólares.
García reiteró que el nuevo tributo no se aplicará al ciudadano, sino a
las entidades bancarias, que no podrán cobrar más de Bs 6,97 por cada
dólar que vendan ni pagar menos de Bs 6,86 por la compra que realicen.
“El banquero o la casa de cambio que quiera pasarse por encima de la
banda de precios, ahí vamos a aparecer nosotros con la Asfi (Autoridad
de Supervisión del Sistema Financiero) y lo vamos a sancionar”.
Al respecto, el presidente del Banco Central de Bolivia (BCB), Marcelo
Zabalaga, aseguró que ninguna entidad financiera podrá salirse de la
banda de precios porque ese ente realiza el control diario de los tipos
de cambio a todas las entidades financieras. “El Banco Central de
Bolivia tiene todos los días un resumen de cuáles son los tipos de
cambio de las entidades financieras, entonces la gente no va a pagar
más”, afirmó.
En julio, la entonces viceministra
de Política Tributaria, Gabriela Mendoza, sostuvo en una entrevista con
este medio que a partir de este año se aplicará a las entidades
financieras una alícuota adicional del 12,5% sobre las utilidades
obtenidas.
Según Mendoza, la medida se debe a que se
verificó que en los últimos años los ingresos del sistema financiero
tuvieron un crecimiento importante, pero que no se comparan con el nivel
de sus aportes que fueron realizados al fisco.
El tributo estimado
Resultado
El ministro Arce proyectó que con el IVME el Estado obtendrá $us 20 MM.
Decisión
Los librecambistas de la Camacho no subieron precios.
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